Un joven mono de la selva, deseoso de tener una larga vida,
decidió preguntarle a la vieja tortuga sus secretos:
—¿Me podría contar cuál es su secreto para vivir tantos
años?—Preguntó el mono
La tortuga sorprendida por el interés del inquieto mono
contestó:
—Las tortugas vivimos muchos años, porque siempre vamos
lento, no tenemos afanes y vivimos tranquilamente.
—Pero yo soy un mono—dijo el joven— y nosotros siempre
vamos rápido de árbol en árbol.
— Bueno es para ti, descansar para recuperar tus
fuerzas. Las tortugas también tomamos largas horas al sol y disfrutamos de una
buena siesta.
— ¿Cómo puedes dormir en una selva llena de peligros?—Preguntó
el mono.
— Para una tortuga es muy fácil protegerse de cualquier
enemigo, escondemos nuestra cabeza en un fuerte caparazón, así ninguno puede
hacernos daño. ¡Recuerda que para tener una larga vida siempre debes cuidar lo
más importante...tu cabeza!
Liliana Mora León
Imagen: Web
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